San Salvador. En la noche del martes 9 de marzo se realizó la Sesión Ordinaria Nº 1 que corresponde a la apertura del Período de Sesiones Ordinarias 2021 dispuesto por el art. 108 inc. h) de la Ley Orgánica de Municipios. La misma se llevó a cabo en la Sala San Martín.
El intendente Lucas Larrarte comenzó su mensaje diciendo:
Este primer año de gestión estuvo signado por la pandemia. Fue, sin lugar a dudas, un año difícil. En San Salvador, al igual que en el resto de las ciudades de la provincia, del país y del mundo, nos vimos afectados por una emergencia sanitaria que nadie esperaba y que provocó una transformación en la vida de todos.
No se si hay palabras para definir el año 2020, seguramente coincidiremos en que fue histórico, inédito, inesperado, desafiante, crítico, cambiante, angustiante y también desgastante para todos. La pandemia no fue una situación grupal, ni sectorial, ni local, ni provincial o nacional, fue un fenómeno de escala mundial.
A un año de aquella declaración de pandemia por el Covid-19 el mundo entero sigue experimentando nuevos brotes. En nuestra ciudad, al igual que en el resto de la provincia y del país, desde fin de año y durante las tres primeras semanas de enero del año en curso, experimentamos un crecimiento significativo de casos. No obstante, gracias al trabajo y compromiso de los equipos de salud, se logró contener la situación y hoy estamos ya en la sexta semana consecutiva de descenso de casos y con un proceso de vacunación en marcha.
Tan es así que durante el mes de enero se registraron en la ciudad un total de 162 casos, mientras que durante el mes de febrero se registraron sólo 16 casos.
Estos datos, en términos epidemiológicos, son buenos y alentadores, ya que de mantenerse, nos van a permitir avanzar en el camino de la habilitación y realización de muchas actividades que el año pasado no tuvimos y no pudimos disfrutar.
A todos nos costó mucho adaptarnos a una nueva realidad, San Salvador no fue la excepción. Como consecuencia de la pandemia, en el transcurso del año 2020, tuvimos que adoptar muchas medidas que -desde el punto de vista social y económico- causaron contratiempos e incluso algunas veces malestar, pero fueron esas medidas y el cumplimiento que de ellas se hicieron, las que permitieron que nuestra ciudad y el departamento tuviera uno de los mejores desempeños epidemiológicos de la provincia.
Trabajamos sin descanso durante todo el año, con aciertos y también errores, los que siempre estamos dispuestos a corregir.
No trabajamos solos, estuvimos muy siempre acompañados por los trabajadores municipales, los de salud, los de la fuerza de seguridad, por los bomberos y por muchos vecinos que de modo anónimo se ofrecieron a colaborar. A todos ellos quiero darles de corazón un infinito agradecimiento.
El del año pasado fue un esfuerzo colectivo y es por eso que este es el momento preciso en que quiero dejar mi agradecimiento a todos los sansalvadoreños. Gracias por lo que como vecinos hemos logrado en términos de estabilidad epidemiológica y gracias en términos de reconocimiento a la comprensión general de las medidas que se tomaron en el marco del aislamiento primero y del distanciamiento después ya que sabemos que demandaron y aùn demandan muchos esfuerzos individuales.
Si bien la pandemia fue una nueva realidad, desde la gestión entendimos que ella no podía ser la única realidad; entonces, al igual que en años anteriores, durante el 2020, emprendimos acciones, proyectamos ordenanzas, hicimos mantenimiento urbano, pudimos resolver algunos de los problemas recurrentes de la ciudad (aunque sabemos que son muchos los que aún nos quedan por resolver), continuamos las obras en ejecución, comenzamos otras y también realizamos gestiones, tanto en la Provincia como en la Nación.
De algún modo, como gestión local, la pandemia nos cambió la vida, pero no nos cambió el objetivo de continuar transformando e integrando la ciudad, sus vecinos y vecinas, procurando un crecimiento equitativo, con justicia social, inclusión y dignidad.